Un grupo de madres de familia del colegio parroquial Juan XXIII, ubicado en la ciudad de Moquegua, ha presentado una presunta denuncia contra el actual director de la institución, a quien acusan de mostrar falta de sensibilidad frente a las bajas temperaturas que afectan a los estudiantes durante el horario de ingreso escolar.
De acuerdo con el testimonio de las denunciantes, los escolares deben salir de sus hogares entre las 6:30 a.m. y 6:45 a.m. para llegar puntualmente a clases a las 7:00 a.m., a pesar de que el Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (SENAMHI) ha alertado sobre heladas extremas en la región. Las madres afirman que la mayoría de los niños presenta síntomas respiratorios como gripe, tos y bronquitis, situación que se agravaría por el horario temprano de ingreso.
“Hemos intentado dialogar con el director, pero presuntamente respondió de manera inadecuada, diciendo que si no queremos que nuestros hijos entren a las 7:00 a.m., entonces que los cambiemos de colegio”, expresó una madre, que pidió mantener su identidad en reserva por temor a represalias.
Asimismo, las madres señalan que el director ha prohibido a los estudiantes el uso de prendas abrigadoras no oficiales, como chalinas, casacas o chompas personales, exigiendo que se utilice únicamente el uniforme institucional, el cual, según indican, es demasiado delgado para enfrentar el intenso frío matutino.
“Hasta hace poco ni siquiera permitía el uso del buzo del colegio. A las niñas que iban con abrigo o vestido las anotaban en la libreta. Es un colegio parroquial, no estrictamente particular, pero presuntamente se está manejando con una rigidez innecesaria”, manifestó otra madre afectada.
Ante esta situación, las denunciantes hacen un llamado urgente a las autoridades de la UGEL Mariscal Nieto y al Obispado de Moquegua, para que se tomen medidas que protejan la salud de los escolares, como el ajuste del horario de ingreso durante el periodo de heladas.
“Queremos que se priorice el bienestar de nuestros hijos. No pedimos reducir clases, solo que puedan ingresar un poco más tarde para evitar enfermedades. Las madres están preocupadas y muchas no denuncian por temor”, concluyeron.
